San José en almíbar
¿Los maragatos están para el postre?. En la jornada de ayer miércoles enfrentaron al mejor equipo hasta el momento en la región. Vivimos dos tiempos claramente opuestos, el primero todo de Durazno, el segundo casi todo de San José. De mitad de cancha hacia arriba un azote este conjunto rojo, que planteó el encuentro en campo maragato. Parecía que el local era el visitante, ya que la pelota y los argumentos para tenerla eran del equipo rojo. San José en mute, nada. Pero el juego es así. Apareció el gol a los 11 minutos que le dio un golpe importante al partido. Fabricio Martínez definió para el uno a cero, la pelota que le cayó servida en una defensa con problemas. Durazno siguió atacando, canalizó todas las pelotas por el medio con su enganche Wilmar González y conectó bien a las puntas endiabladas: los Morán. Pero repetidamente definieron mal. Además de encontrarse con la mejor noche del arquero Molina de San José. Mientras Illada planteaba un encuentro ficticio… los pelotazos para Martín Rodríguez que mide 40cm menos que los zagueros eran inútiles, como la creación de San José en tres cuartos de cancha. Todo hacía pensar que Durazno se lo iba a llevar puesto con goles, pero no fue así en el primer tiempo. La página se cerró injustamente a favor del local. En el complemento de pique Molina otra vez salva a San José en una bonita jugada de la visita por derecha. Sebastián Cabó, el mejor maragato, no podía aguantar solo el envión. Incluso con cambios ofensivos, Durazno atacó por todos lados, pero llegó una jugada decisiva en el partido. El pibe Leandro Olivera (lateral derecho) se la jugó, comenzó el ataque él por izquierda en una contra, la tocaron bien con Martínez y Rodríguez, y el guacho que define contra el palo para el dos a cero. Bien por el pibe que recuperaba la titularidad en este partido, y bien por San José siendo muy conformistas, que llegó dos veces y marcó. De ahí en más todo fue diferente. Durazno sintió feo el segundo gol y se puso nervioso, no sabía como llevar como antes. Crecieron las figuras en la mitad de la cancha y la defensa. San José era otro. Jugó mejor y tuvo mucho más actitud que su rival. Hasta que todo se desvirtuó en el minuto 35. Fabián Morán la abrió para el volante Marrero, que la paró de pecho y sin dejarla picar la mandó de 35 metros al ángulo del arco maragato. Golazo, sin palabras. A falta de 10 para terminar, un gol pesadísimo. Las jugadas de contra se dieron para el sanjo, que tuvo una con López en una gran jugada personal pero definiendo mal. Y la mala marca justo sucedió al final. Centro en la hora y Echandía cabeceó solo para marcar el empate. Así se cerró el partido. Dos a dos, que en el balance parece estar bien. Pero como fue el partido es injusto para San José. Parece que los rojos del Yí prepararon el postre para el sábado, veremos, yo siempre apuesto por el plus extra que tiene el jugador maragato, que muchas veces lo ha sacado victorioso.Diego Travieso.
Foto: Diario El Acontecer (Durazno)
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